Una felicidad pequeña:
Bajo al super a llevar boletos para el sorteo de una cestorra de Navidad. Los estoy metiendo en la megahucha, que ya no caben. Y una señora, enjuta (mojamuta no), algo desdeñosa, me dice:
-¿Qué son, para las cestas de Navidad?
Y yo le digo:
- Sí señora.
Así todo muy barrio de los Alcántara.
Y ella me dice:
- Pues toma, estos tres. Total, yo no voy a venir.
La cajera, una chavala muy simpática, le dice:
- Señora, señora, que mire que la llaman al teléfono si gana.
Total, que no. Que la señora con la mano extendida, y yo con cara de:
-( ... a ver, ¿dónde está la cámara?... ummm... hoy vengo afeitado... no he sudado... no, no puede ser por la facha... pues nada, ocasiones asíNNN) En fin, que le cojo los boletos, y veo que la cajera, con cara de Lisa Simpson en morena, me ofrece un boli que escribe verde, y no lo dudo.
De repente se me aparece la cara del Hombre de Cristal de Amèlie, y me dice:
- No se pueden dejar escapar ocasiones asíiiii , y aunque me lo dice en francés subtitulado, yo me dejo llevar por el boli. Y mientras escribo, me da la risa.
Le digo a la cajera:
- Esto tiene que ser una señal , y aunque se lo digo en gallego con subtítulos, me entiende, y se ríe.
Pues nada. Que haya suerte. Pero eso sí, hay que salir a buscarla!!
DANIEL I LA REALITAT
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Parlàvem fa poc un amic i jo de la frustració que suposa per a alguns egos
tornar a casa.
Eixe, -com vaig llegir una volta al respecte del cantant Michel...
Hace 3 años
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