viernes, 2 de enero de 2009

De bien nacido...

En mi adolescencia descubrí una reflexión muy aguda en la que no había reparado hasta aquel momento. Es posible que sólo entonces estuviera preparado para compartir tal pensamiento. Nunca sabes dónde te vas a encontrar una idea como ésta, que son el detonante de nuevas actitudes y nuevas perspectivas.
Podría perfectamente estar escondida entre las líneas del Quijote, dirigida a Sancho, a los Sanchos que hay en la vida de toda persona, pero no, estaba incluida en una peli de ciencia-ficción juvenil, y la proponía un personaje que ejercía un papel paternal y sereno frente a la audacia de la juventud:


¿Quién es más loco? ¿el loco, o el loco que sigue al loco?
Y me he acordado de esta frase a propósito de nosotros. Aunque, honestamente, en nuestro caso, no es ya que uno esté siguiendo al otro, sino que paso los días convencido de que alternamos esos papeles.

Sea como fuere, estuve echando la vista atrás, como bien le corresponde a estas fechas, y vi que si de algún modo aparento coherencia, si lo firme de mi actitud parece hacerme uno de esos idealistas, un loco digno de ser seguido, es porque un buen día tú apareciste con la suficiente lucidez como para hacerme ver que podía tomar la iniciativa, no sé si de ser mejor persona, pero seguro, seguro, de ser fiel a mí mismo.

Por algo tan esencial te estoy siempre agradecido. Y espero estar cerca de ti, como Quijote o como Sancho, según mande la ocasión, para que me equilibres, para que te equilibre.

1 comentario:

Majo dijo...

Aquí lo dicen mucho mejor Manolo y Quimi:

Qué dulce era hablar
si te hacía sonreír
sentados en cualquier bar.
Tuve que marchar
porque soy un músico loco.
(...)
Es lo que hay,
(...)
no sé a donde voy,
ni qué haré una vez allí...

Ya sabes que me encantan los puntos suspensivos ;)